LOS TIRANTES.

Para el proceso constructivo de los tirantes se realizó inicialmente el montaje de una sección del tablero, colocando simultáneamente un contrapeso, puesto que el tirante con su propia catenaria hace que tenga un peso mayor que el de la misma sección del tablero.  Este proceso se repite sucesivamente hasta llegar a la totalidad del montaje.  Se utilizaron 24 contrapesos.  Sólo se permitía un movimiento del mástil hasta de 26 cm.  A diario se realizaba un levantamiento topográfico de todos los puntos, incluyendo los pilones, para poder determinar las actividades que se debían realizar día a día, y poseer una visión general del puente.  Este estudio se enviaba a Lisboa (Portugal), puesto que como se mencionó anteriormente todo se debe analizar a través del “estudio de geometría” y un acompañamiento diario de la obra con una prevista simulación.

“La diferencia entre construir una obra normal donde se colocan todos los tirantes al mismo tiempo, las partes del tablero, etc., con una obra de este tipo, es que en esta obra se debe cuidar y estudiar cada paso constructivo”.

“Un estudio de geometría se demora seis meses.  Lo más difícil de explicar ha sido que este proceso no se hace a la deriva, sino con una planeación adecuada.  La gente se pregunta por qué se demoró tanto en estudios, pero la gente no sabe todo lo que hay detrás de la construcción de estos puentes.  En esta construcción no se puede arriesgar nada, porque es una inversión de US $26.000.000, entonces no puede existir ningún error”.